viernes, 6 de agosto de 2010

Palabreando

- Vamos a ver, cuál de vosotras me dice una palabra que tenga las cinco vocales.

Silencio. Nos miramos. Somos una maestra y dos periodistas. Levanto la mano entusiasmada.

- Lo tengo: murciélago.

- Esa es la que todo el mundo sabe. Decidme más.

Volvemos a pensar y -espero que por el ruido del ir y venir de la gente en el Centro Abierto- no damos con ninguna palabra.

- Colúmpiate. Aurelio. Numerario. Eucalipto. Hipotenusa. Y la mejor de todas: educación. Con cinco 'e': entretenerse. Con cinco 'i': dificilísimo.

En cinco minutos nos ha dado un buen repaso. La otra periodista y la maestra se van. Sonrío, le coloco bien la gorra y nos sentamos a mirar un reportaje sobre pobreza publicado hace poco y en el que aparece como protagonista.

- "Si hay algo que no querías que saliera o que no es correcto, dímelo. Explica que tienes 70 años, que llegaste a Cataluña de pequeño y que fuiste barbero. También dice que pasaste 10 años en la cárcel por robo y que ahora tienes una pensión de 300 euros."

"Está bien", responde. Sus ojos ya no sonríen como siempre. Y entonces me coge bolígrafo, no para escribir versos o juegos de palabras como hace muchas veces, sino para dejar su voz junto al reportaje: "Yo he cumplido prisión y mi paga no me da". Nos levantamos, salimos, nos abrazamos y nos vamos cada uno por su lado.